Con el interés de relacionar las emociones al cuerpo, intentos que se remontan a pensadores antiguos, el biomagnetismo propone lo siguiente: cada emoción se manifiesta con un desequilibrio biomagnético cambiando con ello la bioelectricidad del cuerpo, un síntoma emocional persistente ocasionará una alteración física, este pensamiento es el que rige la terapia de biomagnetismo psicoemocional.
Ahora revisemos algunos pares psicoemocionales y su aplicación:
Hígado - Corazón (par psicoemocional para la ira)
Corazón - Vejiga (Par psicoemocional para el resentimiento)
Temporal derecho - temporal derecho
(par psicoemocional para la agresividad física y sentimientos de crueldad)
Bulbo raquídeo - corazón
(par psicoemocional para sentimientos de crueldad)
Sien derecha - corazón
(par psicoemocional para sentimientos de tristeza, que pueden derivar en vitiligo y fenómenos de pigmentación)
Rótula - Rótula (par psicoemocional para la ansiedad)
Riñón izquierdo - ojo izquierdo (par psicoemocional para el miedo)
Bazo - hipotálamo
(par psicoemocional relacionado con la pereza)
Es
recomendable combinar esta terapia de pares biomagnéticos
psicoemocionales y alguna terapia psicológica, otras terapias que pueden
combinarse son terapia de regresión, extractos de flores de bach, entre
muchísimas otras terapias complementarias.
Esperamos
que la información les sea de utilidad y que se generen muchas dudas al
respecto para que dentro de su investigación lleguen a conclusiones.